martes, 9 de noviembre de 2010

hora de llamar a la cordura?

El 30 de octubre pasado John Stewart and Stephen Colbert, dos conocidas figuras de la sátira política norteamericana, celebraron en Washington D.C. su Rally to Restore Sanity, algo así como Mitín para Restaurar la Cordura.

Su mensaje: una crítica a los medios de comunicación norteamericanos, que más que servir como espacios para la información y el debate, actúan como cajas de reverberancia que sólo propagan la histeria y despertar temores en los ciudadanos.

La verdad, es que una pareja de comediantes lucen como los candidatos menos probables para llamar a la cordura a alguien, y quizás el mismo es debilitado un poco debido a las críticas que ambos han hecho a figuras del partido republicano.

No obstante esas críticas, este llamado a la cordura no deja de tener sentido en medio de la histeria que parece correr rampante en la actualidad en Estados Unidos. Y todo esto me lleva a pensar, no sería necesario hacer algo parecido en Venezuela?

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No voy a extenderme con una diatriba sobre los evidentes defectos de Globovisión o VTV ni las acusaciones mutuas ni sus justificaciones. El asunto en cuestión es que ambos están equivocados, y mientras ambos siguen sumergidos en la histeria, los espacios naturales de debate y discusión desaparecen.

No obstante, no siempre es así. En junio de este año El Nacional publicó una columna de Barrera Tyszka titulado "Manifiesto". A continuación lo esencial del mismo:

"El objetivo es uno solo: lograr un inmenso pacto nacional en contra del disparate.

No es un proyecto complicado. Este nuevo movimiento no busca otra cosa que la sensatez, que la cordura ciudadana, tan común y tan corriente como el sujeto, verbo y predicado de todos los días. 'Un poquito de coherencia, carajo'. Ese podría ser el lema de enganche para la campaña de lanzamiento. " [1]

Creo que la necesidad de discutir existe, el asunto es lograr crear ese espacio para la discusión de los problemas nacionales. Cuál es ese espacio? Probablemente no son los medios de comunicación - al menos no los actuales - los más apropiados para ello. Internet es quizás el menos idóneo de todos. Los foros venezolanos en internet no son más que válvulas de escape a través de las cuales la gente desahoga su furia y frustración ciegamente, dejando muy poco espacio para el debate constructivo.

Se me ocurren algunas líneas básicas sobre las que debería fundamentarse el debate:
- Si Chávez tiene derecho a ser presidente o no debe quedar fuera del debate.
- El objetivo es buscar respuesta a las demandas de la población.
- Se deben discutir problemas concretos, reales, cotidianos.
- Se debe ir a la raíz de cada asunto.
- Reconocer el derecho del otro a su posición política.
- No debe haber temas tabú.

Es difícil imaginar que nuestro liderazgo político atienda este llamado a la cordura, pero no es a ellos a quien está dirigido. Los destinatarios de este mensaje son todos aquellos que confrontan la dura realidad venezolana. Mientras las personas que se encuentren en aceras opuestas no se den cuenta que sus problemas de ambos sectores son los mismos, independientemente del color que cada quien prefiera en su boleta electoral, serán otros los que se beneficien en su lugar. Bien dice una conseja popular alemana: cuando dos pelean, un tercero se beneficia...


[1] http://www.noticierodigital.com/forum/viewtopic.php?t=666415

martes, 2 de noviembre de 2010

Los 150 mil músicos que pudieron ser

Cuando conozco a extranjeros y digo que soy venezolano, la primera cosa que suele mencionar la mayoría es el nombre de Hugo Chávez. Quizás a algunos venezolanos les emocione eso - después de todo millones de venezolanos siguen apoyándolo, pero a mi me parece un poco decepcionante. Qué un político - más conocido por su estridencia que por sus virtudes como estadista - sea la primera referencia del país es... un fastidio.

La segunda referencia más frecuente es a El Sistema. No es muy frecuente, la verdad sea dicha, pero es sin lugar a dudas un tema más agradable que la política. Sin lugar a dudas que eso me ha llevado a interesarme más por la música clásica.

La música clásica es algo nuevo para mi. Mi contacto con la música se limita a oir algunas piezas clásicas en Looney Tunes cuando niño y quizás algo en el soundtrack de alguna película como Se7en, pero todo ha cambiado un poco con la popularidad de El Sistema.

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Vi el concierto de la Sinfónica Juvenil Teresa Carreño en Berlin. No tuve la ocasión de verlos en persona, pero tuve la suerte de poder ver la transmisión del concierto por internet. Impresionante y conmovedor.

Veo los rostros de los muchachos de la Sinfónica y no puedo evitar pensar en el potencial de un país joven como lo es Venezuela. Mucho se habla de los incuantificables recursos minerales de Venezuela y de las oportunidades perdidas en los diversos booms petroleros. No obstante, pareciera que el recurso más importante se desperdicia sin que nadie siquiera pestañee.

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En los últimos 10 años han muerto 150 mil personas de manera violenta en Venezuela. Muchos de esos 150 mil muertos eran hombres jóvenes. Cuantos de esos no pudieron convertirse en músicos de El Sistema? O en atletas profesionales?

Lo que parecen olvidar las personas que rigen los destinos de la nación venezolana es que esos 150mil personas que han muerto eran seres humanos. Algunos dirán que algunos de esos muertos eran criminales, pero acaso los criminales no tienen la posibilidad de redimirse?

Algunos tenemos la suerte de contar con padres buenos, recursos y oportunidades. Sin ellos no habría tenido la oportunidad de estudiar y llegar a ser quien soy. Pero para quienes no tienen la misma fortuna, oportunidades como las que ofrece El Sistema deberían ser la norma y no la excepción. Y no sólo en música, sino también en deportes, arte y ciencias.

Por qué en lugar de expropiar empresas, comprar armas y financiar a aliados en otros países (se calcula que más de $60mil millones han sido donados en otros países) no se ha invertido en convertir a El Sistema en un programa que llegue a todos los jóvenes?